Organizacion Sin Animo de Lucro
Adscrita al Judaismo Ortodoxo Moderno
Desde Monsey, New York
Parashá Shemot Vayakel Pekudé
Aliyot Shemot Vayakel - Pekudé
Lectura Mediante Robot -
Shemot - Éxodo- Capítulo 35:1 al 40:38
y
Yejezquel 45:16 al 46:18
Por Eliyahu BaYonah Ben Yossef,
Director Shalom Haverim Org.
New York
Aliyot es el
plural hebreo de Aliá o Aliyá
que significa "subir". Cada vez
que una persona - Olé- sube a la
Bimá debe recitar la
Brajá -Bendición- antes de comenzar el Baal Koréh -בעל קורא - la Lectura y al cerrar la misma. Esto se
hace cada vez que el Baal Koréh
lee la Porción -Parashá-
correspondiente.
El Maftir es la
última persona que se llama a la
Bimá y es invitada a leer la
porción de la Haftará -Lectura de los Profetas-
Esta es la Brajá
de la Lectura de la Toráh:
Barejú et Adonai
hamevoraj. |
Baruj Adonay hamevoraj
le'olam va'ed. |
Baruj atáh Adonay
Eloheynu melej ha'olam,
asher bajar banu
mikol-ha'amim, venatán
lanu et-torató. |
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tser. |
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Vayavo'u kol-ish asher
nesa'o libo vekol asher
nadvah rujo oto hevi'u
et-trumat Adonay
limelejet Ohel Mo'ed
ulekol-avodato ulevigdey
hakodesh. |
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Uvajaroshet even
lemal'ot uvajaroshet ets
la'asot bekol-melejet
majashavet. |
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Vaya'as et-shemen
hamishkah kodesh
ve'et-ketoret hasamim
tahor ma'aseh roke'aj. |
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Ravua hayah kaful asu
et-hajoshen zeret orko
vezeret rojbo kaful. |
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LECTURA DE LA HAFTARÁ -
Ezequiel 45:16 - 45:25; 46:1 -
46:18
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Baruj atáh Adonay jabóker batoráh uveMoshé avdó uveYisra'el amó
uvinvi'ey ja'emet
vatsédek. |
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Después saldrá y se cerrará la puerta luego que haya
salido. |
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Baruj atáh Adonay, Eloheynu melej ha'olam, tsur kol-ha'olamim,
tsadik bekol-jadorot,
ha'El jane'eman, ha'omer
ve'osej, jamedaber
umekayem, shekol-devarav
emet vatsedek. |
Ne'eman, atah ju Adonay Eloheynu, vene'emanim devareyja, vedavar
ejad midvareyja ajor
lo-yashuv reykam, ki El
melej ne'eman verajaman
atah. |
Baruj atáh Adonay, ha'El jane'eman bekol-devarav.
-Amen |
Rajem al-Tsiyon, ki ji beyt jayeynu, vel'aluvat nefesh toshia
bimjeraj veyameynu. |
Baruj atáh Adonay, mesame'aj Tsiyon bevaneyj. |
Samejenu, Adonay Eloheynu, be'Eliyahu janavi avdeja, uvmaljut
beyt David meshijeja.
Bimjeraj yavo veyagel
libenu, |
al kis'o lo yeshev zar, velo yinjalu od ajerim et kevodo, ki
veshem kodsheja nishbata
lo, shelo yicbej nero
le'olam va'ed. |
Baruj atáh Adonay, magén David. |
EN ESPAÑOL
¡Bendecid al Eterno, el
Bendito! |
Bendito es el Eterno, el
Bendito para siempre. |
Bendito seas Tu, oh
Eterno nuestro Dios, Rey
del universo que nos
elegiste entre todos los
pueblos y nos diste Tu
Toráh, Bendito seas, oh
Eterno, que nos
concediste la Toráh. |
Bendito seas, oh Eterno,
que nos concediste la
Toráh.
AMEN |
Éxodo - 35:1 al 40:38
|
seis días se hará trabajo, mas el día séptimo será
para vosotros santo,
sábado de descanso en honor del Eterno; todo aquél que hiciere en él obra alguna, será muerto. |
No encenderéis fuego en todas vuestras moradas en el día del sábado. |
Y Moisés habló a toda la congregación de los hijos de
Israel diciendo: Esto es
lo que ha ordenado el
Eterno, diciendo: |
Tomad de vosotros una ofrenda separada para el
Eterno; todo donador de
corazón traerá la
ofrenda separada para el
Eterno: oro y plata y
cobre, |
y tejido de lana azul celeste y púrpura y carmesí, y
lino, y pelo de cabra; |
y pieles de carnero teñidas de rojo, y pieles de
tájash, y maderas de
acacia; |
y aceite para el alumbrado, y especias para el aceite
de la unción y para el
incienso compuesto de
especias; |
y piedras de ónix y piedras de engaste para el efod y
para el pectoral. |
Y todos los sabios de corazón de entre vosotros
vendrán, y ellos harán
todo cuanto ha ordenado
el Eterno: |
el tabernáculo, su tienda y su cubierta, sus
corchetes y sus
tablones, sus
travesaños, sus columnas
y sus basas; |
el arca y sus varas, el propiciatorio y el velo de la
cortina, |
la mesa y sus varas y todos sus utensilios, y el pan
de la proposición; |
y el candelabro
para el alumbrado y sus
utensilios ; y sus
lámparas y el aceite del
alumbrado; |
y el altar del incienso y sus varas; y el aceite de
la unción y el incienso
de especias; y la
cortina de la entrada
para la entrada del
Tabernáculo; |
y el altar del holocausto y el enrejado de cobre que
tiene, sus varas y todos
sus utensilios; el
lavatorio y su base; |
las cortinas del atrio, sus columnas y sus basas, y
la cortina de la entrada
del atrio; |
las estacas del Tabernáculo y las estacas del atrio y
sus cuerdas; |
Las vestiduras para el oficio destinadas a hacer el
servicio en el
santuario, que son las
vestiduras santas para
Aarón, el (sumo)
sacerdote, y las
vestiduras de sus hijos
para las funciones
sacerdotales. |
Y salió toda la congregación de los hijos de Israel
de la presencia de
Moisés. |
|
Y vinieron así hombres como mujeres, todo donador de corazón,
y trajeron pulseras y
aros y anillos y
cinturones de castidad y
todo objeto de oro; y
también todo hombre que
separó, por medio del
rito de la tenufá, una
ofrenda de oro para el
Eterno. |
Y toda persona en cuyo poder se hallaron tejidos de
lana azul celeste y
púrpura y carmesí, y
lino y pelo de cabra,
pieles de carnero
teñidas de rojo y pieles
de tájash, los trajeron. |
Todos los que querían presentar ofrenda de plata y de
cobre, trajeron la
ofrenda para el Eterno.
Y todo hombre en cuyo
poder se hallaban
maderas de acacia para
toda la obra del
servicio, las trajo. |
Y toda mujer sabia de corazón hiló con sus manos y
trajo lo que había
hilado, el tejido de
lana azul celeste y la
púrpura y el carmesí y
el lino. |
Y todas las mujeres cuyo corazón estaba elevado por
la sabiduría, hilaron el
pelo de cabra. |
Y los príncipes trajeron las piedras de ónix y las
piedras de engaste para
el efod y para el
pectoral; |
y las especias, y el aceite para el alumbrado y el
aceite para la unción, y
para el incienso de
especias. |
Todo hombre y mujer de los hijos de Israel cuyo
corazón les impulsó a
traer (ofrenda para toda
la obra que ordenó el
Eterno hacer por
intermedio de Moisés,
trajeron ofrenda para el
Eterno. |
|
y le ha llenado del espíritu de Dios en lo relativo a
sabiduría e inteligencia
y ciencia, y para toda
obra; |
y para inventar creaciones y enseñarlas a los
artífices para que
trabajen en oro y en
plata y en cobre, |
y en labrar piedras para engastes, y para tallar
maderas; para trabajar
en toda suerte de obra
ingeniosa. |
Y ha puesto en su corazón capacidad para enseñar,
tanto en el de él como
en el de Aholiav, hijo
de Ajisamaj, de la tribu
de Dan, |
a los cuales El ha llenado de sabiduría de corazón
para hacer toda suerte
de obras de maestro, de
artista y de bordador en
tejido de lana azul
celeste y púrpura y
carmesí, y en lino, y en
teneduría, y les
convirtió en
realizadores de toda
obra para que hicieran
disenos textiles. |
Y harán (la obra) Betzalel y Aholiav y
todo hombre sabio de
corazón a quien dio el
Eterno sabiduría e
inteligencia para hacer
toda clase de obra para
el servicio del
Santuario; todo lo que
ordenó el Eterno. |
Y llamó Moisés a Betzalel y a Aholiav y a todo hombre
sabio de corazón a quien
dio el Eterno sabiduría
en su corazón, a todo
aquél a quien su corazón
le impulsó para que se
llegase a la obra para
hacerla; |
y ellos tomaron de delante de Moisés todas las
ofrendas que los hijos
de Israel habían traído
para la obra del
servicio del Santuario,
a fin de hacerla; y
mientras tanto, seguían
trayéndole ofrendas
voluntarias cada mañana. |
Y todos los sabios que hacían toda la obra del
Santuario, dejaron cada
cual la labor que
estaban haciendo |
y hablaron a Moisés, diciendo: El pueblo trae más de
lo necesario para el
servicio de la obra que
ordenó hacer el Eterno. |
Y Moisés dio orden e hicieron correr una voz por el
campamento, diciendo:
"Ni hombre ni mujer
prepare mas material
para las ofrendas del
Santuario"; de manera
que el pueblo cesó de
traer más, |
pues ya había material suficiente para hacer toda la
obra, y aún sobraba. |
|
La longitud de cada cortina era de veintiocho codos,
y la anchura de cada
cortina de cuatro codos;
una misma medida tenían
todas las cortinas. |
Y unió cinco de las cortinas entre sí, y las otras
cinco cortinas también
las unió una con otra. |
E hizo presillas de color azul celeste sobre el borde
de una cortina, donde
termina el primer
conjunto; así hizo sobre
el borde de la cortina
que termina el segundo
conjunto. |
Cincuenta presillas hizo en la primera cortina, y
cincuenta presillas hizo
en el extremo de la
cortina del segundo
conjunto; las presillas
estaban contrapuestas
unas a otras. |
E hizo cincuenta corchetes de oro, y unió las
cortinas la una con la
otra por medio de los
corchetes, de modo que
el Tabernáculo vino a
ser un todo. |
E hizo cortinas de pelo de cabras para el
Tabernáculo; once
cortinas hizo para esto. |
La longitud de una cortina era de treinta codos, y de
cuatro codos la anchura
de la cortina; una misma
medida tenían las once
cortinas. |
Y unió cinco de las cortinas aparte, y seis de las
cortinas aparte. |
E hizo cincuenta presillas sobre el borde de la
cortina, en el extremo
del primer conjunto; y
cincuenta presillas hizo
sobre el borde de la
cortina del segundo
conjunto. |
E hizo cincuenta corchetes de cobre para unir la
tienda, para que fuese
un todo. |
E hizo para la tienda una cubierta de pieles de
carnero teñidas de
rojo:, y otra cubierta
hecha de pieles de
tajash por encima de
ésta. |
|
de diez codos era la longitud de un tablón, y de codo
y medio la anchura del
tablón. |
Dos espigas tenía cada tablón yuxtapuestas entre sí:
así hizo con todos los
tablones del
Tabernáculo. |
E hizo los tablones para el Tabernáculo (de esta
manera): veinte tablones
para el costado
meridional, hacia el
sur; |
e hizo cuarenta basas de plata para debajo de los
veinte tablones; dos
basas debajo de un
tablón, correspondientes
a sus dos espigas; y dos
basas debajo de otro
tablón, correspondientes
a sus dos espigas. |
Y para el segundo costado del Tabernáculo, hacia el
lado del norte, hizo
otros veinte tablones, |
con sus cuarenta basas de plata; dos basas para
debajo de un tablón y
dos basas para debajo de
otro tablón. |
Y para la parte posterior del Tabernáculo, hacia el
occidente, hizo seis
tablones, |
y otros dos tablones hizo para las esquinas del
Tabernáculo en la parte
posterior, |
los cuales estaban unidos por la parte de abro, y
estaban del mismo modo
unidos por arriba, por
medio de una argolla;
así hizo con los dos en
las dos extremidades, |
de manera que eran ocho los tablones, con sus basas
de plata; dieciséis
basas, dos basas debajo
de cada tablón. |
E hizo travesaños de madera de acacia; cinco para los
tablones de un costado
del Tabernáculo, |
y cinco travesaños para los tablones del otro costado
del Tabernáculo, y cinco
travesaños para los
tablones del Tabernáculo
en la parte posterior,
hacia el occidente. |
E hizo que el travesaño de en medio pasase por el
centro de los tablones,
de un extremo hacia el
otro. |
y cubrió los tablones de oro, e hizo sus argollas de
oro, por donde habían de
pasar los travesaños, y
cubrió los travesaños de
oro. |
E hizo el velo de tejido de lana azul celeste y
púrpura y carmesí, y de
lino torcido; de labor
de artista lo hizo, con
querubines. |
E hizo para el mismo cuatro columnas de acacia, y las
cubrió de oro, sus
capiteles eran también
de oro; y fundió para
ellas cuatro basas de
plata. |
E hizo una cortina para la entrada de la tienda,
tejida de lana azul
celeste y púrpura y
carmesí, y de lino
torcido, obra de
bordador ; |
e hizo sus cinco columnas y sus capiteles, y revistió
sus capiteles y sus
molduras de oro, y sus
cinco basas las hizo de
cobre. |
E hizo Betzalel
el arca de madera de
acacia; de dos codos y
medio era su longitud, y
de codo y medio su
anchura, y de codo y
medio su altura. |
Y la cubrió de oro puro por dentro y por fuera, e
hizo para ella una orla
de oro alrededor. |
Y fundió para ella cuatro argollas de oro para
colocarlas a sus cuatro
esquinas: dos argollas a
un costado y dos
argollas al otro
costado. |
E hizo varas de madera de acacia y las cubrió de oro. |
Y pasó las varas por las argollas a los costados del
arca, para llevar el
arca. |
E hizo un propiciatorio de oro puro; de dos codos y
medio era su longitud, y
de codo y medio su
anchura. |
E hizo dos querubines de oro; labrados a martillo y
de una sola pieza los
hizo, a los dos extremos
del propiciatorio; |
un querubín por este extremo y el otro querubín por
aquel extremo;
procedentes del
propiciatorio mismo hizo
los querubines, a los
dos extremos de él. |
Y estaban los querubines con las alas extendidas
hacia arriba, cubriendo
con sus alas el
propiciatorio y teniendo
sus caras vueltas la una
a la otra; hacia el
propiciatorio estaban
dirigidas las caras de
los querubines. |
E hizo la mesa de madera de acacia; de dos codos era
la longitud de ella, y
de un codo su anchura, y
de codo y medio su
altura. |
Y la cubrió de oro puro; y le hizo una orla de oro
alrededor; |
y le hizo una moldura alrededor del ancho de un puño;
e hizo al borde una orla
de oro alrededor de su
moldura. |
Y fundió para ella cuatro argollas de oro, y puso las
argollas en las cuatro
esquinas que
corresponden a sus
cuatro pies. |
Frente al borde estaban las argollas por donde habían
de pasar las varas a fin
de llevar la mesa. |
E hizo de madera de acacia las varas para llevar la
mesa, y las cubría de
oro. |
E hizo de oro puro los utensilios que habían de estar
sobre la mesa; sus
moldes y sus recipientes
(para el incienso puro),
y sus medias cañitas de
separación, y sus
soportes que han, de
servir de techo para
ellos (los panes); todo
de oro puro. |
|
Y tenía seis brazos que salían (del tronco), de sus
dos lados; tres brazos
del candelabro de un
lado de él y tres brazos
del candelabro del otro
lado de él. |
Tres copas en forma de flores de almendro en un
brazo, cada una con una
manzanita y una flor; y
tres copas en forma de
flores de almendro en el
otro brazo, con una
manzanita y una flor;
así hizo en los seis
brazos que salían del
candelabro. |
Y en (el tronco) del candelabro había cuatro copas
sucesivas en forma de
flores de almendro, con
sus manzanitas y sus
flores; |
de manera que había una manzanita debajo de dos de
los brazos que salían
del tronco, y una
manzanita deba]o de los
otros dos brazos que
salían de él, y una
manzanita debajo de los
dos brazos restantes que
salían de él; así eran
los seis brazos que
salían |
Sus manzanitas y sus brazos procedían del mismo; todo
ello era una pieza
labrada a martillo, de
oro puro. |
E hizo sus siete lámparas, y sus despabiladeras, y
sus palitas (para la
ceniza), de oro puro. |
De un talento de oro puro lo hizo, con todos sus
utensilios. |
E hizo de madera de acacia el altar del incienso; de
un codo era su longitud
y de un codo su anchura,
cuadrado era; y de dos
codos su altura.
Procedentes del mismo
eran sus cuernos. |
Y lo cubrió de oro puro, así su parte superior como
sus lados alrededor y
sus cuernos; e hizo para
él una orla de oro
alrededor. |
Y dos argollas de oro le hizo por debajo de la orla,
en sus dos esquinas, en
ambos costados, por
donde habían de pasar
las varas a fin de
llevarlo con ellas. |
E hizo las varas de madera de acacia, y las cubrió de
oro. |
E hizo el aceite santo de la unción, y el incienso
puro de especias, según
obra de perfumista. |
|
He hizo los cuernos de éste en sus cuatro esquinas;
procedentes de él mismo
eran los cuernos, y lo
cubrió de cobre. |
E hizo todos los utensilios del altar: los
recipientes (para la
ceniza) y las palas para
retirar las cenizas y
los tazones, los garfios
y los braseros; todos
sus utensilios los hizo
de cobre. |
E hizo para el altar un enrejado de cobre, hecho a
manera de red, debajo
del cerco del altar, por
el lado de abajo, el
cual llegaba hasta la
mitad del altar. |
Y fundió cuatro argollas para los cuatro extremos del
enrejado de cobre, por
donde habían de pasar
las varas. |
E hizo las varas de madera de acacia y las cubrió de
cobre. |
Y pasó las varas por las argollas, a los costados del
altar, para llevarlo con
ellas; hueco y de tablas
lo hizo. |
E hizo el lavatorio de cobre, con su base de cobre, fabricándola con los espejos de las mujeres que
se congregaban a la
entrada de la tienda de
asignación. |
E hizo el atrio; por el costado meridional, hacia el
sur, hizo para el atrio
cortinas de lino
torcido, de cien codos; |
sus columnas eran veinte y sus basas veinte, de
cobre; mas los capiteles
de las columnas y sus
molduras eran de plata. |
Y por el costado del norte, cien codos; sus columnas
eran veinte y sus basas
veinte, de cobre; mas
los capiteles de las
columnas y sus molduras
eran de plata. |
Y del lado oeste, cortinas de cincuenta codos; sus
columnas eran diez y
diez sus basas; los
capiteles de las
columnas y sus molduras
eran de plata. |
Y del lado este, hacia donde nace el sol, había
(cortinas de) cincuenta
codos. |
Había cortinas de quince codos para el primer lado
(de la entrada); sus
columnas eran tres, y
tres sus basas. |
De igual manera para el segundo lado; de esta y de
aquella parte de la
entrada del atrio había
cortinas de quince
codos; sus columnas eran
tres, y sus basas, tres. |
Todas las cortinas del atrio a la redonda eran de
lino torcido; |
y las basas para las columnas eran de cobre, mas los
capiteles de las
columnas y sus molduras,
de plata; también el
revestimiento de la
parte superior era de
plata, y las molduras de
todas las columnas del
atrio eran de plata. |
|
Sus columnas eran cuatro y sus basas cuatro, de
cobre; mas sus capiteles
eran de plata; también
el revestimiento de la
parte superior y sus
molduras eran de plata. |
Y todas las estacas del Tabernáculo y del atrio
alrededor, eran de
cobre. |
|
|
Y Betzalel, hijo de Urí, hijo de Jur, de la tribu de
Judá, hizo todo cuanto
el Eterno había ordenado
a Moisés. |
Y con él estaba Aholiav, hijo de Ajisamaj, de la
tribu de Dan; maestro y
artista y bordador en
tejido de lana azul
celeste, y en púrpura y
en carmesí, y en lino. |
Todo el oro empleado en la obra, en toda la obra del
santuario, es decir, el
oro de la ofrenda, fue
de veintinueve talentos
y setecientos treinta
siclos, según el siclo
del santuario. |
Y la plata de los de la congregación que fueron
empadronados, fue cien
talentos y mil
setecientos setenta y
cinco siclos, según el
siclo del santuario, |
a razón de un beca por cabeza, es decir, la mitad de
un siclo según el siclo
del santuario por cada
uno entre los
empadronados, de edad de
veinte años para arriba,
de los seiscientos tres
mil quinientos
cincuenta. |
Y sirvieron los talentos de plata para fundir las
basas del santuario y
las basas del velo, es
decir, cien basas de los
cien talentos, un
talento para cada basa. |
Y de los mil setecientos setenta y cinco siclos, hizo
capiteles para las
columnas, y revistió sus
partes superiores y las
proveyó de cornisas. |
Y el cobre de la ofrenda fue de setenta talentos y
dos mil cuatrocientos
siclos; |
e hizo con ellos las basas para la entrada de la
tienda de asignación, y
el altar de cobre, y el
enrejado de cobre que
tenía, con todos los
utensilios del altar; |
y las basas del atrio alrededor, y las basas para la
entrada del atrio, y
todas las estacas del
Tabernáculo, y todas las
estacas del atrio,
alrededor. |
Y del tejido de lana azul celeste, y de púrpura y de
carmesí, hicieron las
vestiduras destinadas
para el servicio del
Santuario, e hicieron
con ellas las vestiduras
santas de Aarón, como
había ordenado el Eterno
a Moisés. |
|
Extendieron las láminas de oro y las cortaron en
hilos para entretejerlos
con el hilo azul celeste
y púrpura y carmesí, y
el lino torcido, obra de
artista. |
Le hicieron (al efod) hombreras que lo unían; de sus
dos partes fue unido. |
Y el cinto de adorno que llevaba sobre él formaba con
él una sola pieza, y era
de labor semejante: de
oro, tejido de lana azul
celeste y púrpura y
carmesí, y lino torcido;
como había ordenado el
Eterno a Moisés. |
E hicieron las piedras de ónix rodeadas de engastes
de oro, grabadas con
grabados como de sello,
conforme a los nombres
de los hijos de Israel; |
y las puso sobre las hombreras del efod, por piedras
de recuerdo a favor de
los hijos de Israel;
como había ordenado el
Eterno a Moisés. |
E hizo el pectoral, obra de artista, al estilo de la
obra del efod: de oro,
de tejido de lana azul
celeste y púrpura y
carmesí, y de lino
torcido. |
Era cuadrado, y doblado hicieron el pectoral; de un
palmo era su longitud y
de un palmo su anchura
estando doblado. |
Y engastaron en él cuatro hileras de piedras. En la
primera hilera: un rubí,
un topacio y una
esmeralda; esta fue la
hilera primera. |
Y la hilera segunda: un carbunclo, un zafiro
y un diamante. |
Y la hilera tercera: un ópalos un ágata y una
amatista. |
Y la hilera cuarta: un crisólito, un ónix y un jaspe;
cercadas todas y
guarnecidas de oro en
sus engastes. |
Y las piedras eran doce, conforme a los nombres de
los hijos de Israel,
según los nombres de
ellos, con grabados como
de sello cada una, según
su nombre
correspondiente, para
las doce tribus. |
E hicieron sobre el pectoral cadenillas de
terminación de oro puro,
a manera de trenzado. |
E hicieron dos engastes de oro y dos argollas de oro;
y fijaron las dos
argollas en los dos
extremos (superiores)
del pectoral. |
Las dos cadenillas de oro las pasaron por las dos
argollas a los extremos
del pectoral, |
y los otros dos extremos de las dos cadenillas
ligaron a los dos
engastes, los cuales
fijaron sobre las
hombreras del efod por
su parte delantera. |
E hicieron otras dos argollas de oro, que pusieron en
los dos extremos
(inferiores) del
pectoral, sobre el borde
que está hacia el revés
del efod, por el lado de
adentro. |
E hicieron dos argollas de oro que fijaron sobre las
dos hombreras del efod
hacia abajo, por su
parte delantera, frente
a su enlace, por encima
del cinto de adorno del
efod. |
Y juntaron el pectoral por medio de sus argollas a
las argollas del efod,
con un cordón azul
celeste, para que
permaneciese sobre el
cinto de adorno del
efod, y para que no se
separase el pectoral del
efod, como había
ordenado el Eterno a
Moisés. |
|
y la abertura del manto estaba doblada por dentro
como el cuello de malla
de un corselete, con un
ribete alrededor de la
abertura para que no se
rompiese. |
E hicieron sobre el borde inferior del manto granadas
de tejido de lana azul
celeste y púrpura y
carmesí, y lino torcido. |
E hicieron campanillas de oro puro, y colocaron las
campanillas entre las
granadas, sobre el borde
inferior del manto a la
redonda, entre las
granadas; |
una campanilla y una granada, una campanilla y una
granada sobre el borde
inferior del manto
alrededor, para el
servicio; como había
ordenado el Eterno a
Moisés. |
E hicieron las túnicas de lino, obra de tejedor, para Aarón y sus hijos. |
Y la mitra de lino, y los adornos de las tiaras, de
lino, y los calzones de
lino, hechos de lino
torcido; |
y el cinturón, de lino torcido, tejido de lana azul
celeste y púrpura y
carmesí, obra de
bordador; como había
ordenado el Eterno a
Moisés. |
E hicieron la diadema como corona santa, de oro puro,
e inscribieron en ella
un rótulo con grabados
como de sello: "Santidad
al Eterno". |
Y fijaron en ella un cordón de lana azul celeste para
asegurarla sobre la
mitra por la parte de
arriba, como había
ordenado el Eterno a
Moisés. |
Así fue acabada toda la obra del Tabernáculo de la
tienda de asignación, e
hicieron los hijos de
Israel conforme a todo
lo que ordenó el Eterno
a Moisés; así lo
hicieron. |
|
y la cubierta de pieles de carnero teñidas de rojo, y
la cubierta de pieles de
tájash; y el velo de la
cortina; |
el arca del testimonio y sus varas, y el
propiciatorio; |
la mesa con todos sus utensilios, y el pan de la
proposición; |
el candelabro (de oro) puro y sus lámparas, las
lámparas dispuestas en
su orden, y todos sus
utensilios, y el aceite
del alumbrado; |
y el altar de oro, y el aceite de la unción, y el
incienso de especias, y
la cortina para la
entrada de la tienda; |
el altar de cobre y el enrejado de cobre que tenía,
sus varas y todos sus
utensilios; el lavatorio
con su base; |
las cortinas del atrio, sus columnas y sus basas, y
la cortina para la
entrada del atrio; sus
cuerdas y sus estacas; y
todos los utensilios
para el servicio del
Tabernáculo, para la
tienda de asignación; |
las vestiduras litúrgicas para el servicio del
Santuario, que son las
vestiduras santas para
Aarón, el (sumo)
sacerdote, y las
vestiduras de sus hijos
para ejercer el
sacerdocio. |
Conforme a todo lo que había ordenado el Eterno a
Moisés, así hicieron los
hijos de Israel toda la
obra. |
Y vio Moisés toda la obra, y he aquí que la hicieron;
como había ordenado el
Eterno, así la habían
hecho; y los bendijo
Moisés. |
|
En el mes primero (Nisán), a primero del mes,
erigirás el Tabernáculo de
la tienda de asignación. |
Y pondrás allí el arca del testimonio, y protegerás
el arca con el velo. |
Y traerás la mesa, y pondrás en orden (los panes); y
traerás el candelabro y
encenderás sus lámparas; |
y pondrás el altar de oro para el incienso enfrente
del arca del testimonio;
y pondrás la cortina a
la entrada del
Tabernáculo. |
Y pondrás el altar del holocausto delante de la
entrada del Tabernáculo
de la tienda de
asignación. |
Y pondrás el lavatorio entre la tienda de asignación
y el altar, y pondrás
ahí agua. |
Y pondrás el atrio alrededor (del Tabernáculo), y
colocarás la cortina a
la entrada del atrio. |
Y tomarás el aceite de la unción y ungirás el
Tabernáculo y todo lo
que hay en él; así lo
santificarás con todos
sus utensilios, y será
santo. |
Y ungirás el altar del holocausto con todos sus
utensilios; así
santificaras el altar,
para que sea el altar
cosa santísima. |
Y ungirás el lavatorio y su base; así los
santificarás. |
Y harás que se aproximen Aarón y sus hijos a la
entrada de la tienda de
asignación, y los
sumergirás en agua. |
Y vestirás a Aarón con las vestimentas santas, y lo
ungirás y lo
santificarás, para que
me sirva como sacerdote. |
Y harás que se aproximen sus hijos, y los vestirás
con túnicas, |
y los ungirás como ungiste a su padre, para que me
sirvan como sacerdotes;
así ha de hacerse, para
que su unción les sea
por señal de un
sacerdocio perdurable
durante todas sus
generaciones. |
Y lo hizo así Moisés, conforme a todo lo que el
Eterno le había
ordenado; así lo hizo. |
|
Y Moisés erigió el Tabernáculo, y colocó sus basas, y
puso sus tablones, y
metió sus travesaños, y
levantó sus columnas. |
Y extendió la tienda por encima del Tabernáculo, y
puso la cubierta de la
tienda encima de ésta,
por la parte de arriba,
como había ordenado el
Eterno a Moisés. |
Y tomó el testimonio y lo puso dentro del arca, y
puso las varas al arca,
y colocó el
propiciatorio encima del
arca, por la parte de
arriba. |
Y metió el arca dentro del Tabernáculo, y puso el
velo de la cortina, y
cubrió el arca del
testimonio; como había
ordenado el Eterno a
Moisés. |
Y colocó la mesa dentro de la tienda de asignación,
al costado norte del
Tabernáculo, fuera del
velo. |
Y puso en orden sobre ella los panes delante del
Eterno, como había
ordenado el Eterno a
Moisés. |
Y puso el candelabro dentro de la tienda de
asignación, frente a la
mesa, al costado sur del
Tabernáculo, |
y encendió las lámparas delante del Eterno; como
había ordenado el Eterno
a Moisés. |
Y puso el altar de oro dentro de la tienda de
asignación, delante del
velo, |
y quemó sobre él incienso de especias; como había
ordenado el Eterno a
Moisés. |
|
Y el altar del holocausto lo puso a la entrada del
Tabernáculo de la tienda
de asignación; y ofreció
sobre él el holocausto y
la ofrenda vegetal; como
había ordenado el Eterno
a Moisés. |
Y puso el lavatorio entre la tienda de asignación y
el altar, y puso allí
agua para lavarse. |
Y se lavaron en el, Moisés y Aarón y los hijos de
éste, sus manos y sus
pies. |
Siempre que entraban en la tiend ade asignación y
siempre que se acercaban
al altar, se lavaban;
como había ordenado el
Eterno a Moisés. |
E hizo levantar el atrio alrededor del Tabernáculo y
del altar, y colocó la
cortina a la entrada del
atrio; y acabó Moisés la
obra. |
|
Y no pudo Moisés entrar en la tienda de asignación,
porque la nube posaba
sobre ésta y la gloria
del Eterno llenaba el Tabernáculo. |
Y cuando se alzaba la nube de encima del Tabernáculo,
los hijos de Israel
partían en todas sus
jornadas. |
Pero si no se alzaba la nube, entonces no se movían
hasta el día en que ella
se alzaba. |
Porque la nube del Eterno permanecía sobre el
Tabernáculo de día, y de
noche había fuego en él,
a los ojos de toda la
casa de Israel, en todas
sus jornadas. |
|
Bendito seas Tu oh
Eterno nuestro Dios, Rey
del Universo que nos
diste (Tu Torah), la
Toráh de la Verdad, e
implantaste en nosotros
la Vida Eterna. |
Bendito seas, oh Eterno,
que nos concediste la
Toráh.
(TODOS DICEN AMEN) |
LECTURA DE LA HAFTARÁ
Bendito seas Tú, Eterno
Dios nuestro y Rey del
Universo, que escogiste
buenos profetas y te
complaciste en sus
palabras, que fueron
enunciadas con verdad. |
Bendito seas Tú, Eterno,
que escogiste la Torah,
a Moisés Tu siervo, a Tu
pueblo Israel y a
profetas de la verdad y
y de la rectitud. |
|
Ezequiel 45:16 - 45:25; 46:1 - 46:18
Todo el pueblo de la tierra concurrirá a esta ofrenda
hecha por el príncipe en
Israel. |
Y será obligación del príncipe proveer los
holocaustos y la ofrenda
vegetal y la ofrenda de
libación en las fiestas,
y en los novilunios, y
en los sábados; en todas
las fiestas fijas de la
casa de Israel. El
presentará la ofrenda
por el pecado, y la
ofrenda vegetal, y el
holocausto, y los
sacrificios de paces,
para hacer expiación por
la casa de Israel. |
Así dice el Eterno Dios: En el mes primero, en el
primer día del mes,
tomarás un novillo
joven, sin defecto, y
purificarás el
Santuario. |
Y el sacerdote tomará de la sangre de la ofrenda por
el pecado y la pondrá
sobre las jambas del
Santuario, y sobre las
cuatro esquinas de la
parte superior del
altar, y sobre las
jambas de la puerta del
atrio interior. |
Y así harás también en el séptimo día del mes, a
favor de los que yerren
y de los tontos (que
entran indebidamente al
Santuario); así haréis
la expiación por la
Casa. |
En el primer mes, a los catorce días del mes,
tendréis el Pésaj
(Pascua), fiesta de
siete días; panes ázimos
se comerán |
Y en ese día el príncipe traerá de lo que es suyo,
para hacer expiación por
sí y todo el pueblo de
la tierra, un novillo
como ofrenda por el
pecado. |
Y durante los siete días de la fiesta traerá de lo
que es suyo, como
holocausto al Eterno,
siete novillos y siete
carneros sin defecto,
cada día durante los
siete días; y un cabrito
cada día como ofrenda
por el pecado. |
Y como ofrenda vegetal, ofrecerá una efá (de flor de
harina de trigo) por
cada novillo, y una efá
por cada carnero; y un
hin de aceite por cada
efá. |
En el séptimo mes, a los quince días del mes, en la
fiesta (de Sucot), hará
lo mismo por siete días;
conforme a la ofrenda
por el pecado y conforme
al holocausto, y
conforme a la ofrenda
vegetal y conforme al
aceite. |
Así dice el Eterno Dios: La puerta del atrio
interior, que mira hacia
el oriente, estará
cerrada los seis días
que son de trabajo, mas
en el día del sábado se
abrirá; se abrirá
también en el día del
novilunio. |
Y entrará el príncipe por el camino del vestíbulo de
la puerta que sirve
también de salida, y se
quedará en pie junto a
las jambas de la puerta,
en tanto que los
sacerdotes ofrecen el
holocausto de él y sus
ofrendas de paces, y él
se postrará junto al
umbral de la puerta;
luego saldrá, mas la
puerta no se cerrará
hasta la tarde, |
pues el pueblo de la tierra se postrará junto a la
entrada de aquella
puerta, ante el Eterno,
en los sábados y en los
novilunios. |
Y el holocausto que el príncipe ha de presentar al
Eterno, será: en sábado,
seis corderos sin
defecto y un carnero sin
defecto; |
y la ofrenda vegetal será de una efá (de flor de
harina de trigo) para el
carnero, y para cada
cordero, según pudiere
dar; y de aceite, un hin
por cada efá. |
Y en el día de novilunio, serán dos o un novillo
joven sin defecto, y
siete o seis corderos, y
dos o un carnero; sin
defecto serán. |
Y por ofrenda vegetal, una efá (de flor de harina de
trigo) por cada novillo,
y una efá por cada
carnero, y por los siete
o aunque sea un solo
cordero, según lo que
alcanzare su mano; y de
aceite, un hin por cada
efá |
Y al entrar el príncipe, entrará, por el camino del
vestíbulo de la puerta,
y saldrá por el mismo
camino. |
Mas cuando el pueblo de la tierra se presentare
delante del Eterno en
las fiestas fijas, aquél
que entre por el camino
de la puerta del norte
para adorar, saldrá por
el camino de la puerta
del sur; y el que entre
por el camino de la
puerta del sur, saldrá
por el camino de la
puerta del norte; y no
volverá por el camino de
la puerta por donde
entró, sino que saldrá
por la otra que le es
opuesta. |
Y el príncipe, en las fiestas, al entrar ellos estará
en medio de ellos, y al
salir ellos, saldrán
juntos. |
Y en las fiestas, en las fiestas fijas, la ofrenda
vegetal será de una efá
por cada novillo, y una
efá por cada carnero, y
por los corderos, según
él pudiere dar; y de
aceite, un hin por cada
efá. |
Mas cuando haga el príncipe una ofrenda voluntaria,
sea holocausto o sean
sacrificios de paces,
como ofrenda voluntaria
al Eterno, se le abrirá
la puerta que mira hacia
el oriente, y (el
sacerdote en servicio)
ofrecerá su holocausto y
sus sacrificios de paces
del mismo modo que los
ofrece en el día del
sábado. |
Y ofrecerás en holocausto al Eterno, cada día, un
cordero de un año sin
defecto; cada mañana lo
ofrecerás. |
Y ofrecerás con él cada mañana, como ofrenda vegetal,
la sexta parte de una
efá (de flor de harina
de trigo); y de aceite,
la tercera parte de un
hin para humedecer la
flor de harina, como
ofrenda vegetal al
Eterno; es por estatuto
perpetuo y para siempre. |
Así ofrecerán el cordero y la ofrenda vegetal y el
aceite cada mañana, como
holocausto perpetuo. |
Así dice el Eterno Dios: Cuando el príncipe haga
algún presente a alguno
de sus afijos, herencia
de éste será, a sus
hijos pertenecerá; su
posesión toca a ellos
por herencia (antes o
después de muerto). |
Mas si de su herencia hiciere un presente a alguno de
sus siervos, de éste
será hasta el año de la
libertad (jubileo), y
luego volverá al
príncipe. Pero la
herencia dada a sus
hijos, de éstos será. |
Y el príncipe no quitará nada de la herencia del
pueblo, defraudándolos
de su posesión; sino que
de su propia posesión
dejará herencia a sus
hijos, a fin de que
ninguno de mi pueblo sea
echado de su posesión. |
Bendito seas Tú, Eterno, Dios nuestro y Rey del
Universo, fuerte de
todos los mundos, justo
en todas las
generaciones; Dios fiel,
que dice y obra, que
promete y cumple, cuyas
palabras son verdad y
justicia. |
Fiel eres Tú, Eterno, Dios
nuestro, y tus promesas
son merecedoras de fe;
ninguna de Tus palabras
dejará de cumplirse,
porque Tú eres Dios y
Rey fiel (y piadoso). |
Bendito seas Tú, Eterno, Dios fiel
en todas tus palabras.
-Amen |
Ten piedad de Sión, pues es el
hogar de nuestra vida, y
salva a esa ciudad
afligida de espíritu,
pronto y en nuestros
días. |
Bendito seas Tú, Eterno, que
alegras a Sión en sus
hijos. |
Alégranos, oh Eterno, Dios
nuestro, con la llegada
de Elías, tu profeta y
servidor, y con el
reinado de David tu
ungido.
Llegue pronto su
advenimiento y haga
regocijar nuestros
corazones. |
No permitas que extraños se
sienten en su trono, ni
que otros hereden de su
gloria, pues por tu
santo nombre le juraste
que su luz jamás se
extinguirá. |
Bendito seas Tú, Eterno, Escudo de
David. |
NOTAS EXPLICATORIAS:
Resúmem de la Parashá
Moshé Rabenu exhorta a
los israelitas a que cumplan con
el Shabat, y pide donaciones
para los materiales de la
construcción del Mishkán.
Recolecta oro, plata, piedras
preciosas, cueros de animales y
tejidos, así como también
incienso y aceite de oliva para
la Menorá y para las unciones.
Los Príncipes de cada una de las
doce tribus traen piedras
preciosas para el pectoral y el
efod del Cohen Gadol. Dios elige
a Betzalel y a Oholiav como los
maestros artesanos para la
construcción del Mishkán y sus
vasijas. Los Hijos de Israel
realizan tantas contribuciones
que Moshé comienza a rechazar
donaciones. Se diseñan cortinas
especiales con dos fundas
diferentes para servir como
material para el techo y la
puerta del Mishkán. Se conectan
bloques cubiertos de oro sobre
bases de plata para formar las
paredes del Mishkán. Betzalel
erige el Arón Hakodesh (Arca),
que contiene las Tablas, y lo
hace de madera cubierto con oro
por adentro y por afuera. En la
tapa del Arca se hacen dos
pequeñas figuras aladas, una
frente a la otra, con las alas
extendidas sobre el Arca. La
Menorá y el Shulján (la mesa con
los panes) también están hechos
de oro. Se construyen dos
Altares: uno pequeño para quemar
el incienso, hecho de madera
cubierta con oro, y otro más
grande, para los sacrificios,
hecho de madera cubierta de
cobre.
Parashat Pekudé
El Libro de Shemot concluye con
la Parashá Pekudé. Después de
terminar todas las diferentes
partes, vasijas y ropas usadas
en el Mishkán, Moshé hace un
recuento y enumeración completa
de todas las contribuciones y de
todas las ropas y vasijas que se
confeccionaron. Los israelitas
le traen todas las donaciones a
Moshé. El inspecciona todo el
trabajo y advierte que todo fue
hecho de acuerdo con las
especificaciones de Dios. Moshé
bendice al pueblo. Dios habla
con Moshé y le dice que el
Mishkán debe ser establecido el
primer día del primer mes,
Nisán. También le explica a
Moshé el orden en que se debe
montar el Mishkán y todos sus
implementos. Moshé cumple con el
mandato del modo prescripto.
Cuando el Mishkán por fin queda
listo, con todos los implementos
en los lugares correspondientes,
desciende una nube sobre el
Mishkán, seña de que la gloria
de Dios se posa sobre él. Cada
vez que la nube se aleja del
Mishkán, los israelitas van tras
ella. De noche, la nube es
reemplazada por un pilar de
fuego.
"Y todo hombre cuyo corazón estaba inspirado" (35:21)
Imagínate llegando a una
impecable planta de computadoras
de alta teconología y ofreciendo
tus servicios como constructor
de chips de computación.
Cada chip tiene apenas unos
pocos milímetros de superficie
pero contiene millones de
transistores y es capaz de hacer
millones de cálculos en los
pocos segundos que te lleva
decir: "Vengo en busca de
trabajo".
Ellos te dicen: "Muy bien. ¿Qué
experiencia tiene?"
Tú dices: "Ninguna. Pero en el
fondo de mi corazón yo sé que
puedo construir todos los chips
que necesiten".
"Ajá... bueno, mire, acá dando
vuelta a la calle hay una
fábrica de alimentos. ¿Por qué
no prueba suerte allí? Me parece
que le va a ir mejor si fríe los
"chips" de ellos, en vez de los
nuestros..."
Al irse de Egipto, los Hijos de
Israel habían sido esclavos en
aquella tierra durante 210 años.
Las únicas habilidades que
habían desarrollado en aquellos
años de aprendizaje eran mezclar
mortero y cargar piedras. No
precisamente el terreno de
estudio más ideal para el grado
extremadamente elevado de
artesanía que hacía falta para
la construcción del Mishkán. ¿De
dónde aprendieron a ser
carpinteros, bordadores,
herreros, escultores y
tejedores?Y así y todo, fueron a
ver a Moshe y le dijeron: "Lo
que mi amo ordene, lo haremos".
Y lo hicieron.
El Mishkán estaba a cargo de la
complejísima función de unir el
Cielo con la Tierra. Pero por
ser un edificio espiritual, lo
único que necesitaba era el
deseo de sus constructores de
unirse a Hashem, y entonces
Hashem, por así decirlo,
completó el resto de sus
"currículum vitae".
Cuando se trata de servir a
Hashem, de ser buenos judíos y
buenas personas, debemos
recordar que no hace falta
experiencia previa. Lo único que
se necesita es un corazón
inspirado.
Rambán, Rabí Yoshua Bertram
*
"Los keruvim.. con sus
rostros el uno hacia el otro"
(37:9)
El Mishkán y, más tarde, el Beit
ha Mikdash, representaron el
"casamiento" del pueblo judío
con Hashem. Los Keruvim que
estaban tallados en la parte
superior de la cubierta del Arca
Sagrada eran como un barómetro
que mostraba el estado de ese
matrimonio.
Si había shalom bait, "armonía
marital", entre el Creador y Su
pueblo, los Keruvim tenían los
rostros enfrentados; pero cuando
el pueblo judío se descarriaba y
Le era infiel a Hashem, los
rostros de los Keruvim miraban
en direcciones opuestas.
La Mishná en Avot nos dice que
en Yom Kipur, cuando todo el
mundo estaba parado en el patio
del Beit ha Mikdash, no cabía un
alfiler. Nadie se podía mover.
Pero cuando llegaba el momento
de postrarse en el rezo, había
lugar de sobra.
Lo mismo ocurre con el
casamiento de un hombre y una
mujer: si la persona "se para",
se para sobre su dignidad, si se
para únicamente para sí mismo,
si se para con orgullo y la
cabeza en alto, entonces el
matrimonio puede comprimirnos.
Uno no se puede ni mover.
Pero si la persona se agacha,
rebajando sus intereses
personales en pos de los de su
cónyuge, entonces hay lugar de
sobra para todos.
V.S.
*
"...diez cortinas de lino,
entrelazadas con lana turquesa,
púrpura y carmesí..." (36:8)
¿Por qué a veces la Torá nos
parece tan repetitiva?
En la parashá de esta semana, la
Torá repite la detallada
descripción del Mishkán y de sus
accesorios que ya había hecho en
la parashat Terumá.
¿Para qué la repetición?
El Maguid de Dubno era famoso
por sus mashalim (parábolas),
que siempre daban en el blanco,
con una narración era capaz de
ilustrar un concepto de Torá,
iluminando los ojos y las mentes
de todos los oyentes.
Una vez, el Gaón de Vilna le
preguntó cómo hacía para narrar
parábolas tan maravillosas. El
Maguid le respondió con otro
mashal.
Había una vez un príncipe que
ansiaba enormemente
transformarse en un tirador
experto. Un día, mientras
viajaba, llegó a una pequeña
aldea. Allí se llevaba a cabo
una competencia de tiradores al
blanco. El príncipe advirtió que
uno de los competidores tenía
una precisión inigualable.
Siempre daba en el centro del
blanco.
El príncipe le preguntó cómo era
que siempre obtenía tan buenos
resultados.Y esto fue lo que le
respondió: "Pues bien: en primer
lugar le apunto al árbol.
Después, una vez que la flecha
se clavó en el árbol, voy
corriendo y le pinto círculos
alrededor".
Prosiguió el Maguid de Dubno:
"Yo hago lo mismo. Antes que
nada, encuentro una historia
interesante; después buscó un
versículo relevante o un
pensamiento de Torá que se le
adapte".
Algo así fue lo que hizo Hashem
cuando creó el universo.
Primero, "escribió" el mashal,
que es la Torá, y después,
observándola, creó el mundo. La
Torá es el anteproyecto del
mundo. Pero más que el
anteproyecto del arquitecto, que
no tiene vida, la Torá es el
dínamo, la fuente de energía
espiritual, que hace que el
mundo dé vueltas.
La luz fluorescente consume unos
pocos vatios, mientras que el
aire acondicionado necesita
varios miles de vatios.
Del mismo modo, la "electricidad
espiritual" de un versículo de
Torá solo bastó para proveer a
todas las criaturas del mar:
"Que en las aguas proliferen
seres vivos..." (1:20).
Sin embargo, el Mishkán, que era
la "morada" de Hashem en este
mundo, necesitaba una "corriente
espiritual" mucho más grande.
Por eso hacen falta tantos
versículos de la Torá con
referencia al Mishkán. Cada
versículo que lo describe es
como un vatio más de energía.
Rabí Mordejai Perlman
Parashat Pekudé
"Estos son los recuentos del Mishkán..."
(38:21)
En el recuento que hace Moshé de los gastos del Mishkán, solamente se
calcula la plata, no el oro.
La razón es que la plata se
reunió a través de la donación
obligatoria del medio shekel,
que todos los Hijos de Israel
debían entregar.
Moshé se dio cuenta de que,
inevitablemente, entre el pueblo
habría personas de naturaleza
sospechosa, buscadores de
cuentas, y por ese motivo hizo
el recuento de la plata.
Sin embargo, el oro fue donado
únicamente por personas de
corazón abierto y generoso,
entre las que no había lugar
para la sospecha y la búsqueda
de cuentas.
Ahavas Yonason
"...el Tabernáculo del Testimonio..."
(38:21)
El Tabernáculo era en sí mismo testimonio de la precisión del recuento de
Moshé, porque si hubiera habido
hasta la más mínima malversación
de fondos, ciertamente la
Presencia Divina no se habría
posado sobre él.
Por ese motivo, se lo llama el
Tabernáculo del Testimonio.
El Malbim
"...piedras de recordación a
los Hijos de Israel" (39:7)
Pregúntale a
cualquiera que no haya tenido
educación religiosa qué sintió
cuando se puso por primera vez
una kipa en público.
Te dirá que es como
transformarse en embajador.
Embajador del pueblo judío.
Embajador del Propio Dios. Ahora
todo el pueblo judío y Hashem
pueden ser juzgados de acuerdo
con el modo en que te comportas.
Hace cinco minutos decían: "¡Eh!
¡Miren a ése que se está
colando!". Ahora dicen: "¡Eh!
¡Miren al judío que se está
colando!".
El judío, a diferencia de la
persona de color, siempre tiene
la opción de entremezclarse con
el medio, de acortarse la nariz,
de acortarse el apellido.
Pero ni bien "sale" y lleva los
signos del judaísmo, sus actos
reflejan no sólo al individuo
que es, sino a todo el pueblo
judío, y a Dios.
En el joshen, el pectoral, que
llevaba el Kohen Gadol, había
doce piedras. En esas piedras
estaban inscritos los nombres de
las Tribus de Israel. Se
llamaban "piedras de recordación
ante los Hijos de Israel".
Porque el pueblo judío
recordaban que sus nombres
estaban inscritos en esa prenda
sagrada, y entonces les daba
vergüenza cometer un pecado.
Meshej Jojma; Rabbi Calev Gestetner
*
"Y Moshé vio toda la obra (del Mishkán)
y he aquí que lo habían hecho
tal como había ordenado el
Todopoderoso... y Moshe los
bendijo" (39:43)
Rabí Moshe Helfan era un
recaudador de fondos de la
Yeshiva Telz de la ciudad de
Cleveland. Uno de sus donantes
habituales era un granjero judío
que tenía una granja en
Pensilvania. El granjero solía
hacer una pequeña donación
anual. Sin embargo, en los años
70, cuando subió el precio del
petróleo, el costo de la nafta
que hacía falta para conducir
hasta Pensilvania y de regreso
era más que el dinero que solía
donar el granjero.
Rabí Helfan se encontró en un
dilema. Por un lado, no podía
utilizar los fondos de la
Yeshivá para financiar un viaje
que sabía que causaría una
pérdida. Pero, por otro lado, no
podía privar al granjero del
mérito de hacer su donación.
Dijo: "Para el granjero, es un
enorme mérito donar para la
yeshivá. ¿Cómo lo voy a privar
de eso?"
Entonces, Rabí Helfan decidió
viajar a Pensilvania, pagando de
su propio bolsillo el costo de
la nafta.
¿No es cierto que en las cenas
de recaudación de fondos para
una instituto de beneficiencia,
los miembros del instituto
suelen ser los que alaban y
bendicen a los donantes?
En realidad, tendría que ser al
revés.
Porque a través del esfuerzo
personal en crear un instituto
de beneficiencia que vale la
pena, les dan a los donantes
mucho más que lo que los
donantes les dan a ellos.
El instituto de beneficiencia
les dio a los donantes un
depósito en el Banco Nacional
del Olam Habá (Mundo Venidero),
que es un banco que no sufre ni
de inflación ni de mala
administración.
Entonces, ¿por qué es al revés,
que los miembros del instituto
les agradecen a los donantes?
La respuesta es que estamos
siguiendo la tradición de Moshe
Rabenu, quien tras enumerar todo
el detalle del Mishkán, bendijo
al pueblo por todo lo que habían
traído, si bien ellos deberían
haber sido los que lo bendijeran
a él.
Rabbi Zalman Sorotzkin;
Rabbi Zelig Pliskin en "Growth
through Torah"
"Moshe erigió el Mishkán; colocó sus zócalos y puso en su lugar sus
tablones, e insertó sus listones
y erigió sus columnas" (40:18)
¿Dónde están los secretos
ocultos del mundo? ¿En qué parte
de la Creación habremos de
hallarlos?
Al estudiar el Mishkán y sus
vasijas, sus sogas, la Menorá,
la descripción de su armado y
desarmado, estamos contemplando
los secretos del mundo.
Pocos son los que son capaces de
penetrar en la profundidad del
Mishkán. Tal vez un solo hombre
sabio y santo en cada
generación. Tal vez unos pocos
más, individuos excepcionales,
con la instrucción de un gran
sabio de la Torá logren tener
una idea de esos secretos
ocultos.
Sin embargo, es deber de cada
judío ahondar y profundizar y
rezarle a Hashem para que le
abra los ojos aunque sea un
poquito, a fin de contemplar
aunque sea un solo instante
dichos misterios.
Porque cuando la persona se
esfuerza, encuentra. La Torá
está casada con el pueblo judío.
La Torá quiere impartirles sus
secretos a los que son dignos de
ellos, porque "más que el
ternero quiere mamar, la vaca
quiere dar de mamar".
Cada uno de nosotros es capaz de
descubrir constantemente nuevas
ideas de la Sagrada Torá,
siempre y cuando dirija su
corazón al Cielo. Con tan sólo
mirar hacia arriba, El mirará
hacia abajo e iluminará nuestros
ojos con la luz de Su Torá.
El Malbim
35:1 Y Moisés
reunió a toda la congregación de los hijos de Israel y les
dijo: Estas son las cosas que el
Eterno ordenó hacer:
Moisés reunió
Según el Midrash, Moisés reunió a la congregación de los hijos de
Israel para enseñarles las leyes
del sábado, pues Dios le había
dicho: "Adopta esta costumbre de
reunir al pueblo, a fin de
enseñarle las reglas de conducta
e inspirarle el amor por la
Torah. Estas reuniones servirán
de modelo para las futuras
generaciones. Así la luz no se
apagará en Israel, y mi nombre
será glorificado de generación
en generación"(Midrash, Yalcut
408).
35:2 seis días se hará trabajo, mas el día séptimo será para
vosotros santo, sábado de
descanso en
honor del Eterno; todo aquél que hiciere en él obra alguna, será muerto.
En honor del
Eterno
Al comenzar la construcción del Tabernáculo, la Torah nos recuerda
la observancia del sábado para
decirnos que a pesar de que la
construcción del santuario es un
precepto divino, no se permite
por ello profanar la santidad
del shabbat.
35:3
No encenderéis fuego en todas vuestras moradas en el día del sábado.
No encenderéis
fuego
Este precepto pertenece a la categoría de las leyes llamadas jukim,
acerca de las cuales la Torah no
explica su porqué.
35:14 y
el candelabro para el alumbrado y sus utensilios ; y sus
lámparas y el aceite del
alumbrado;
Y el
candelabro
Cuatro eran los objetos principales del Tabernáculo: el arca, la
mesa, el altar y el candelabro.
El arca simbolizaba la cultura
espiritual; la mesa, la cultura
material; el altar, el
sacrificio para alcanzar la
perfección; el candelabro, la
luz para iluminar el camino de
la vida del ser humano.
35:22 Y vinieron así hombres como mujeres, todo donador
de corazón, y trajeron pulseras y aros y anillos y
cinturones de castidad y todo
objeto de oro; y también todo
hombre que separó, por medio del
rito de la tenufá, una ofrenda
de oro para el Eterno.
Donador de
corazón
Mejubarot significa "juntas"; esto es, cuando se leen ésta y la
siguiente perashá en un mismo
sábado.
36:1 Y harán (la obra) Betzalel
y Aholiav y todo hombre sabio de corazón a quien dio el Eterno
sabiduría e inteligencia para
hacer toda clase de obra para el
servicio del Santuario; todo lo
que ordenó el Eterno.
Betzalel y
Aholiav
Esta perashá relata la
construcción del Tabernáculo tal
como Dios ordenó a Moisés en las
parashiyot anteriores. El pueblo
respondió fervorosamente a la
demanda y trajo sus ofrendas. La
escuela de arte de los
israelitas estaba bien
estructurada y dirigida por dos
grandes maestros: Betzalel, de
la tribu de Judá, y Aholiav, de
la tribu de Dan. La especialidad
del primero eran los trabajos en
oro, plata y cobre, engaste de
piedras preciosas, talla de
maderas; y el segundo servía a
las demás artes. Dios capacitó a
estos dos maestros para que
enseñasen toda clase de
artesanías a los demás hombres
hábiles que practicaban sus
artes en la construcción del
Tabernáculo bajo su orientación,
y que debía ser finalizada de
acuerdo con las órdenes de
Moisés.
37:1 E hizo
Betzalel el arca de madera de acacia; de dos codos y
medio era su longitud, y de codo
y medio su anchura, y de codo y
medio su altura.
Hizo Betzalel
"E hizo Betzalel el arca de
madera de sittim" (acacia). El
arca fue el único objeto que
este maestro hizo con sus
propias manos, pues la divina
presencia del Todopoderoso
debería posar en ella, entre los
dos querubines. La Cabalá
explica que por esto se le dio
el nombre de Betzalel, que
significa "en la sombra de
Dios", por consiguiente, sólo él
estaba designado para hacer este
trabajo. ¿De qué manera podía
estar Dios en el Tabernáculo y
al mismo tiempo en el mundo
entero? Rabí Josué Desijnin
compara el caso a una caverna
que se encuentra a orillas del
mar. Las olas entran en la
caverna, ésta se llena de agua,
pero el mar no disminuye por
esto. Del mismo modo, la gloria
del Todopoderoso llenaba el
Tabernáculo (40,35) sin
disminuir en el resto del mundo
(Bamidbar Rabáh 12, 4). También
si el sol puede penetrar en una
habitación sin menoscabo, la
omnipresencia de Dios puede
manifestarse en todo lugar.
37:17 E hizo el
candelabro de oro puro; labrado a martillo de una sola pieza hizo el
candelabro; su base y su tronco,
sus copas y sus manzanitas y sus
flores procedían de él mismo.
El candelero
de oro puro
La Ley prohibe hacer
candelabros iguales a la Menorah
del Tabernáculo. Esta
prohibición no existe para la
fabricación de una Menorah de
igual forma, pero con mayor o
menor número de brazos que la
original (Menajot 28:), lo que
permitió a los rabinos creadores
de la Menorah de la fiesta de
Janucá, utilizar el diseño de la
original añadiendo un octavo
brazo para el servicio de esta
fiesta (aparte del suplementario
denominado shamash). La Menorah
se convirtió en el símbolo
judaico más conocido. Los
grabados hechos en varias
menorot a través de los siglos,
revelan frecuentemente las
creencias prevalecientes en
ciertas épocas. Hay candelabros
italianos de Janucá del siglo
15, decorardos con tritones y
centauros, en tanto que las
menorot posteriores sólo
muestran una antorcha rodeada de
leones. Las orientales suelen
estar decoradas con motivos de
lunas crecientes, estrellas y
pájaros, mientras que los
antiguos ejemplares rusos y
polacos, inspirados en el Zóhar
(Behaalotejá 148),
38:8 E hizo el
lavatorio de cobre, con su base de cobre, fabricándola con los espejos de
las mujeres que se congregaban a
la entrada de la tienda de
asignación.
El lavatorio
de cobre
El Kiyor (lavatorio) era un recipiente de cobre con sus llaves de
agua en la parte exterior, y lo
usaban Aarón y sus hijos para
lavarse las manos y los pies
antes de hacer los servicios
sagrados. Este utensilio se hizo
con los espejos de metal que las
mujeres israelitas usaban para
su coquetería, y que, aun así,
los donaron. Moisés rehusaba
aceptar estos objetos para el
uso sagrado, pero Dios le dijo:
Recibe estos espejos, pues son
para Mí más queridos que
cualquier otra cosa. Estos
enseres que sirvieron para
destacar en Egipto la gracia y
la belleza de la mujer
israelita, harán que se reflejen
en el Tabernáculo sus nobles y
piadosos sentimientos. La
obligación de los israelitas de
lavarse las manos antes de
rezar, y la de los cohanim antes
de bendecir al pueblo (Bircat
Cohanim), se inspiró en el uso
del Kiyor, ya que actualmente
los rezos de nuestro ritual
sustituyen al servicio que se
hacía en el Templo.
38:21 Estas
son las cuentas (de las cosas)
del Tabernáculo, del Tabernáculo
del Testimonio, que fueron enumeradas
por orden de Moisés para el servicio de los levitas, bajo la dirección de
Itamar, hijo de Aarón, el (sumo)
sacerdote.
Enumeradas por órden de Moisés
Moisés, que era el responsable
de todos los trabajos, reunió a
la colectividad y presentó el
balance de las cuentas en
público, a fin de no dar lugar a
dudas en lo que se refiere al
empleo de la plata, del oro y de
otras donaciones hechas para la
confección del Tabernáculo. Aún
siendo venerado, y conocida su
honestidad por todos, Moisés
insistió en presentar cuentas,
sirviendo de ejemplo a los
futuros dirigentes comunales
para que hiciesen lo mismo.
"Cuando suene la hora de que el
hombre comparezca ante el
Supremo Juez, Dios pedirá en
primer lugar que le rindan
cuentas, para comprobar si fue
honesto en sus
transacciones"(Yalcut, Isaías
502).
·
39:11 Y la hilera segunda: un carbunclo, un
zafiro y un diamante.
·
Un zafiro
Cuenta el Midrash que una de
las piedras preciosas del
pectoral del sumo sacerdote, se
perdió. Era el zafiro, y no
podían encontrar otro del mismo
tamaño y color, apropiado para
su uso. Los rabinos tomaron
conocimiento de que un cierto
pagano cuyo nombre era Damá,
hijo de Netiná, lo poseía, y
éste se propuso venderlo por mil
siclos de plata. Pero cuando
entró en su gabinete para tomar
la piedra preciosa, vio que su
padre estaba acostado sobre la
llave de la caja de seguridad, y
no quiso molestarle. Los rabinos
creyeron que aquello era un
pretexto por parte del vendedor,
y aumentaron el precio de la
piedra, no logrando a pesar de
todo convencerle. Esperaron
entonces un cierto tiempo, hasta
que Netiná despertó. Su hijo
tomó la piedra y dijo a los
rabinos: "Hela aquí. Págame el
precio de mil siclos, pues no
quiero sacar provecho del
respeto que debo a mi padre".
Ver en el Talmud (Kidushim 31)
cómo recompensó Dios a Damá por
este gesto: permitiendo que
naciera en su rebaño la Para
Adumá (la vaca bermeja - ver
comentario en Números 19).
·
39:27
E hicieron las túnicas de lino,
obra de tejedor, para
Aarón y sus hijos.
·
Para Aharón y
sus hijos
Cuenta el Talmud (Maséjet Shabbat), que habiendo oído un noble pagano el
relato de la magnífica
indumentaria que vestía el sumo
sacerdote (caben gadol), se
dirigió al jefe de la célebre
escuela Bet-Shamay y le dijo:
"Poseo una gran fortuna y soy
muy considerado entre la gente.
Me quiero convertir al judaísmo
con la esperanza de llegar a ser
algún día sumo sacerdote, y
poder llevar sus ornamentos".
Oyendo esto, Shamay le despidió
rudamente.El pagano no se
desanimó y se dirigió al famoso
Hilel, manifestándole su deseo.
Hilel le hizo ver con buenas
maneras que nadie, a no ser de
la familia de Aarón, el sumo
sacerdote, podría llevar dichas
vestiduras (ver Números 18, 7).
El pagano comprendió y renunció
a sus pretensiones, pero se
convirtió al judaísmo y fue un
buen israelita, haciendo parte
del reino de sacerdotes (pueblo
de Israel) (ver Éxodo 19, 6).
Entonces dijo: La rudeza de
Shamay me rechazó, pero la dulce
manera de Hilel me acogió y me
hizo llegar a esto.
·
40:2 En el mes primero (Nisán), a primero del mes,
erigirás el
Tabernáculo de la tienda de asignación.
·
El Tabernáculo
El Midrash cuenta esta parábola referente a la Casa de Dios: Un rey tenía
una hija a quien adoraba. La
educó de la mejor manera
posible, y cuando estuvo en edad
de casarse, escogió un marido
digno de ella. Una vez celebrada
la boda, al llegar el amargo
momento de la despedida, el rey
habló en estos términos a su
joven yerno:"Te doy a mi hija
como esposa, desligándome así de
mi derecho de permanecer en su
proximidad. Espero que sabrás
cuidar bien de ella, y como me
resulta dura esta separación, te
pido, querido yerno que siempre
me reserves un aposento para que
pueda ir de vez en cuando a
disfrutar de la compañía de este
ser que me es tan querido".De
igual modo Dios dio la Torah su
hija querida, al pueblo de
Israel, recomendándole: "Te
confío esta joya. Espero que
sabrás cuidar de ella y que no
olvidarás reservarme, en
cualquier lugar donde vivas, una
morada de la que Yo pueda hacer
uso para permanecer al lado de
mi hija. Desde entonces, el
templo se constituyó en casa de
Dios.
40:17 Y
sucedió pues en el mes primero
del segundo año, a primero del
mes, que fue erigido el
Tabernáculo.
·
El Tabernáculo
El
Tabernáculo fue hecho, sobre
todo, con el propósito de
inculcar en el pueblo la idea de
la presencia divina: la de que
Dios se encuentra en todo lugar
y acompaña al hombre dondequiera
que esté. "En todo lugar donde
Yo haga recordar mi nombre,
vendré a estar contigo y te
bendeciré" (Éxodo 20: 24).Cuando
Tito penetró en el Templo de
Jerusalem, buscó al Dios que los
isrealitas adoraban, pero nada
pudo encontrar. Como pagano, no
podía comprender cómo era
posible adorar a un Dios
invisible."He aquí que los
cielos y los cielos de los
cielos no te pueden contener,
cuanto menos esta casa", dijo el
rey Salomón (1 Reyes 8, 27).
Pero cuando los hombres estamos
unidos y elevamos con sinceridad
nuestros corazones al Eterno, El
baja y habita entre nosotros,
conforme está dicho: "Y harán
para Mí un santuario, y Yo
habitaré entre ellos" (capítulo
25, 8).
·
40:35 Y no
pudo Moisés entrar en la tienda
de asignación, porque la nube
posaba sobre ésta y la gloria
del Eterno llenaba el
Tabernáculo.
·
El Tabernáculo
El verdadero significado del Mishcan (Tabernáculo) sólo es comprensible
si tomamos en cuenta su sentido
y su posición. La Divinidad se
había revelado al pueblo de
Israel por medio de la Shejiná
(Divina Presencia), que
simboliza la revelación de Dios
al hombre. Shejiná es el
espíritu divino descendiendo
sobre el hombre. El Mishcan está
etimológicamente unido con
Shejiná, pues ambos provienen de
la raíz shajón (morar), que en
forma alegórica utiliza la Torah
con relación a la divinidad. El
pueblo de Israel se había
elevado en el monte de Sinay a
las alturas espirituales. El
abandono del Sinay podía
significar el abandono de la
presencia constante de la
divinidad entre el pueblo. Este
es el sentido del mandamiento
divino al ordenar la
construcción del Mishcán. Es
necesario resaltar la absoluta
negación del antropomorfismo, en
el sentido de morada de Dios. El
principal móvil del Mishkán es:
"Y moraré entre ellos"; no "en
él" (betojó), sino "entre ellos"
(betojam), con lo que se llega a
la absoluta negación del
antropomorfismo. El templo no es
morada de Dios, sino de los
hombres, y su principal
propósito es el de perfeccionar
la condición divina del ser
humano. El Mishcán y todo lo que
contenía estaba destinado a
simbolizar e inculcar en el
pueblo la presencia de la
divinidad, por lo cual podríamos
definir al Mishcán como un
templo para el hombre más que un
templo para Dios. Así podemos
interpretar también las palabras
del rey Salomón al construir el
Templo de Jerusalem: "¿Pero en
verdad habitará el Eterno sobre
la tierra? He aquí que los
cielos y los cielos de los
cielos no te pueden abarcar,
cuanto menos esta casa que yo
acabo de edificar... Que tus
ojos estén abiertos de noche y
de día sobre esta casa, sobre
este lugar del cual has dicho:
Mi nombre estará allí. Y que
oigas la oración que tu siervo
hará en este lugar" (1 Reyes 8,
27-29). Los cielos no pueden
abarcar al Eterno, ni el Mishcán
ni el Templo hacen que descienda
la divinidad; no la encierran ni
enclaustran, pero engrandecen al
hombre y lo elevan para que él y
su corazón lleguen hasta Dios.
El verdadero templo es el que se
construye en los corazones. En
el primer versículo de esta
perashá, se encuentra repetida
dos veces la palabra Mishcán, y
los rabinos ven en esta
repetición una alusión (rémez)
al Templo que fue dos veces
destruido. Otra interpretación
afirma que la palabra Mishcán
tiene gran semejanza con
mashcón, lo que significa prenda
o garantía. Siendo así, el
Mishcán es una prenda que Dios
tiene del pueblo de Israel.
Cuando Israel abandona la senda
de Dios, El exige su prenda, y
ésta fue la causa de la
destrucción de los dos Templos.
Pero si éstos fueron destruidos
materialmente, el Templo
espiritual jamás lo será porque
"la nube del Eterno estará sobre
él de día, y de noche habrá
fuego en él, a los ojos de toda
la casa de Israel, en todas sus
jornadas" (versículo 38).
Iejeskel 45:16 -46:18
El Shabat antes de Rosh
Jodesh Nisán es llamado Shabat
Hajodesh. En Rosh Jodesh Nisán,
el Pueblo Judío recibió la
primera de las 613 mitzvot: la
santificación de la luna. En
mérito a esa mitzvá, el pueblo
judío adquirió el control sobre
el tiempo, teniendo la
posibilidad de santificar a la
luna para establecer el período
de los meses y determinar así en
qué días caerán las fiestas de
Pesaj, Shavuot, Sucot, a
diferencia del Shabat, que es
fijo y llega cada siete días.
Así el hombre se convierte en
socio de Dios para santificar el
tiempo: Dios, a través de la
santidad fija del Shabat; y el
pueblo judío, a través de las
fiestas.
Canciones que cantamos en la mesa de Shabat
ELIAHU HANAVI
"EL PROFETA ELIAS..."
Vahashiv lev avot al habanim...
"El retornará los corazones de
los padres respecto de sus
hijos"
Eliahu ha Navi, según
explican los Sabios (Bava Metzia
84b), tiene la responsabilidad
de despertar a los Patriarcas
Abraham, Itzjak y Yaakov, para
que recen, y luego los devuelve
a su descanso. Un Rosh Jodesh,
llegó tarde a la yeshivá de Rabí
Yehuda Hanasí, y le explicó que
se había retrasado por la
necesidad de despertar a cada
uno por separado, y aguardarlo a
que terminara de rezar, antes de
despertar a los otros.
"¿Por qué no levantas a los tres
juntos y ahorras tiempo?, le
preguntaron.
"Rosh Jodesh es un momento
especialmente oportuno para la
llegada del Mashíaj", respondió,
"y si los tres Avot rezaran
juntos, correríamos el riesgo de
que trajeran al redentor antes
de la hora indicada".
En nuestra canción de Eliahu,
expresamos nuestra confianza de
que cuando se acerque el momento
de la redención, se oiga el
permiso celestial para "retornar
los corazones de los padres", al
dejarlos rezar juntos por la
redención de sus hijos.
La Tierra de Israel
BEIT SHEMESH
Esta gran ciudad se ha transformado, para muchos
judíos religiosos, en
prácticamente un suburbio de
Jerusalén. Sin embargo,
históricamente hablando, estaba
conectada con la capital de
Israel de otra forma.
Cuando los filisteos les quitaron el arca sagrada a
los israelitas, se asustaron
tanto por el estrago que les
mandó el Cielo, que enviaron el
arca de regreso a Israel en un
furgón conducido por animales,
sin jinete. El furgón se dirigió
hacia Beit Shemesh, donde fue
recibido con gran algarabía.
Posteriormente, el arca fue llevada de Beit Shemesh a
Kiriat Yearim, y de allí a
Jerusalén, al mando del Rey
David.
PROMESAS DE HASHEM
46:9
Uvevo am-ha'arets lifney Adonay bamo'adim haba
derej sha'ar tsafon
lehishtajavot yetse derej-sha'ar
negev vehaba derej-sha'ar negev
yetse derej-sha'ar tsafonah lo
yashuv derej hasha'ar asher-ba
vo ki nijejo yetse.
Mas cuando el pueblo de la tierra se
presentare delante del Eterno en
las fiestas fijas, aquél que
entre por el camino de la puerta
del norte para adorar, saldrá
por el camino de la puerta del
sur; y el que entre por el
camino de la puerta del sur,
saldrá por el camino de la
puerta del norte; y no volverá
por el camino de la puerta por
donde entró, sino que saldrá por
la otra que le es opuesta.
Escrito y Recopilado por: Rabino Yaakov Asher Sinclair de la Organización Ohr Somayach de Israel
y Monsey
Editado por el Moréh Eliyahu BaYona, Director de Shalom Haverim, Monsey,
New York.
SEA PARTE DE ESTE PROYECTO JUDEO-HISPANO